Pablo Machín, entrenador del Numancia, ha reconocido antes de partir con la expedición rojilla hacia tierras alicantinas la necesidad no sólo de puntuar sino de ganar en Elche, "si queremos no pasar tantos apuros como van a pasar los equipos de abajo". Apenas tres goles ha marcado el conjunto rojillo en competición oficial y para salir de los puestos de peligro no le queda más remedio en Elche que afinar de una vez la puntería, en un encuentro en que Machín tendrá que mover el banquillo de forma obligada por las ausencias de Sunny, por sanción, de Gorka Larrea, por lesión, y de Julio Álvarez, convocado por la selección de Venezuela. Además tampoco viajan, por decisión técnica, Iñigo Díaz de Cerio, Ladero, Culebras y Gallardo.
Machín ha reconocido que tendrá que realizar cambios, en la "posición de doble pivote", donde entrarán desde el inicio Nagore y el canterano Víctor Andrés. "De los equipos que nos hemos enfrentado, ninguno me ha demostrado que sean mejores que nosotros. Vamos a intentar que las circunstancias no se den en nuestra contra, para cambiar la dinámica, el equipo coja confianza y vaya para arriba", ha manifestado Machín, que ha abogado por ser práctico, al necesitar el equipo "cuanto antes" una victoria que le dé al Numancia más tranquilidad.
En cuanto al Elche, que lleva tres jornadas sin ganar, Machín ha augurado que será un partido complicado, y ha negado que sea un equipo violento, aunque sí es cierto, ha dicho, que juega muy al límite, "pero todos tenemos esa posibilidad, porque al final es un juez quien determina si pasa o no la línea". "El Elche maneja todos los tiempos del partido, saben jugar de forma distinta si van ganando o perdiendo y es algo que su entrenador se lo ha sabido inculcar; además se han reforzado muy bien, tienen mejor plantilla que el año pasado, y su objetivo es conseguir cuando menos la misma clasificación que el año pasado y para ello necesitan ganarnos a nosotros, pero el Numancia está tan necesitado más que ellos", ha explicado.
Machín ha asegurado que, ante la falta de gol, los jugadores comienzan a tener algo de ansiedad, por la presión del entorno periodístico y de la propia afición. "Es normal que todos estemos un poco preocupados, aunque obsesión no hay", ha manifestado Machín, quien confía en los delanteros y jugadores de segunda línea para romper la sequía goleadora. El entrenador rojillo ha asegurado que durante la semana ha incidido mucho en las finalizaciones de las jugadas y ha descartado introducir modificaciones en el sistema táctico empleado hasta la fecha.
"Estamos teniendo una media de tres o cuatro ocasiones por encuentro y deben ser suficientes para llevarnos un partido; y si no las materializamos, tendremos que seguir intentando hacer más, y además hay que evitar las jugadas a balón parado, donde el Elche lleva muchos goles en esta faceta", ha señalado. Además, ha apuntado que las jugadas de estrategia son importantes, más ante el Elche que tiene un especialista como Albacar y rematadores que confían en un buen lanzamiento para marcar goles.
Machín ha reconocido que tendrá que realizar cambios, en la "posición de doble pivote", donde entrarán desde el inicio Nagore y el canterano Víctor Andrés. "De los equipos que nos hemos enfrentado, ninguno me ha demostrado que sean mejores que nosotros. Vamos a intentar que las circunstancias no se den en nuestra contra, para cambiar la dinámica, el equipo coja confianza y vaya para arriba", ha manifestado Machín, que ha abogado por ser práctico, al necesitar el equipo "cuanto antes" una victoria que le dé al Numancia más tranquilidad.
En cuanto al Elche, que lleva tres jornadas sin ganar, Machín ha augurado que será un partido complicado, y ha negado que sea un equipo violento, aunque sí es cierto, ha dicho, que juega muy al límite, "pero todos tenemos esa posibilidad, porque al final es un juez quien determina si pasa o no la línea". "El Elche maneja todos los tiempos del partido, saben jugar de forma distinta si van ganando o perdiendo y es algo que su entrenador se lo ha sabido inculcar; además se han reforzado muy bien, tienen mejor plantilla que el año pasado, y su objetivo es conseguir cuando menos la misma clasificación que el año pasado y para ello necesitan ganarnos a nosotros, pero el Numancia está tan necesitado más que ellos", ha explicado.
Machín ha asegurado que, ante la falta de gol, los jugadores comienzan a tener algo de ansiedad, por la presión del entorno periodístico y de la propia afición. "Es normal que todos estemos un poco preocupados, aunque obsesión no hay", ha manifestado Machín, quien confía en los delanteros y jugadores de segunda línea para romper la sequía goleadora. El entrenador rojillo ha asegurado que durante la semana ha incidido mucho en las finalizaciones de las jugadas y ha descartado introducir modificaciones en el sistema táctico empleado hasta la fecha.
"Estamos teniendo una media de tres o cuatro ocasiones por encuentro y deben ser suficientes para llevarnos un partido; y si no las materializamos, tendremos que seguir intentando hacer más, y además hay que evitar las jugadas a balón parado, donde el Elche lleva muchos goles en esta faceta", ha señalado. Además, ha apuntado que las jugadas de estrategia son importantes, más ante el Elche que tiene un especialista como Albacar y rematadores que confían en un buen lanzamiento para marcar goles.
@andionrubia
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